Las habitaciones grandes y los edificios se llenan. El aire no se mueve bien. Esto hace que la gente pase frío o calor. Desperdicia energía. Aumenta los costes. Los pequeños ventiladores normales y los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado antiguos no pueden solucionar este problema. Dejan grandes espacios con puntos fríos y calientes. La gente se siente cansada o enferma. Los productos se estropean. Las facturas suben. Es un gran problema para fábricas, almacenes, gimnasios, granjas, tiendas e incluso hospitales.
leer más